Esta semana hemos empezado las clases en el Hospital de Dolores de una forma muy dulce. Beatriz Santana, profesora de inglés de secundaria de profesión y vocación -pero repostera creativa por afición- nos impartió un taller delicioso de técnicas para hacer "cake pops" y decorarlos, así como de la utilización correcta del "fondant" para decorar "cupcakes".
Aunque esta terminología nos resulte un tanto desconocida para los no iniciados en las artes culinarias, lo cierto es que resultó bastante sencillo de elaborar siguiendo las buenas explicaciones de la ponente y a la manipulación de los ingredientes "in situ", gracias a disponer de los utensilios adecuados, y a la estupenda disposición y colaboración del personal de cocina del Hospital de Dolores. Agradecemos encarecidamente a su jefa de cocina, Doña Gloria Quintero, su implicación e interés en el desarrollo del taller, poniendo a nuestra disposición todo aquello que nos hiciera falta para llevarlo a cabo.
Aunque esta terminología nos resulte un tanto desconocida para los no iniciados en las artes culinarias, lo cierto es que resultó bastante sencillo de elaborar siguiendo las buenas explicaciones de la ponente y a la manipulación de los ingredientes "in situ", gracias a disponer de los utensilios adecuados, y a la estupenda disposición y colaboración del personal de cocina del Hospital de Dolores. Agradecemos encarecidamente a su jefa de cocina, Doña Gloria Quintero, su implicación e interés en el desarrollo del taller, poniendo a nuestra disposición todo aquello que nos hiciera falta para llevarlo a cabo.
Asimismo, el taller sirvió de estímulo para las alumnas de formación profesional que están haciendo las prácticas de cocina en las instalaciones del Hospital y que fueron invitadas a participar en el mismo.
Al finalizar el taller todos nos llevamos para casa una muestra de nuestro trabajo, del que -con posterioridad- dimos muy buena cuenta. Como anécdota simpática de la jornada, nos resultó muy gracioso enterarnos del hecho de que el perro de Beatriz se hubiera comido la noche anterior el bizcocho de chocolate que ella había preparado con el fin de utilizarlo para elaborar pequeñas bolas envueltas en chocolate y expuestas en ramillete debidamente preparadas. Ante lo delicioso de sus creaciones no nos extraña que su mascota se sintiera atraída por el olor y el sabor de sus productos...
Una vez más hemos tenido la suerte de contar con la presencia de gente interesante para gente interesada.
1 comentario:
Fue muy graciosa esta clase de repostería, Ojalá el año que viene pudiera estar en alguna de ellas, pues me pareció muy interesante las cositas que aprendimos.
Un beso.
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